miércoles, 26 de agosto de 2015

Finanzas Familiares - Finanzas con Propósito

FINANZAS CON PROPÓSITO

Cuando falta el consejo, fracasan los planes; cuando abunda el consejo, prosperan.
                                                  Proverbios 15:22


Hay diferentes formas de vivir la vida, de acuerdo a su condición cada uno es libre de escogerla como bien le parezca. Este concepto está fundamentado sobre la base del libre albedrío, y tendremos, con la misma libertad con la que asumimos el reto de vivir la vida, la de asumir con gallardía las consecuencias.  Sin embargo, cuando se trata del ámbito familiar, la capacidad de vivir la vida con la libertad que otorga el libre albedrío se reduce debido a la responsabilidad que se adquiere al guiar y proteger a un grupo de personas que están ligadas emocionalmente a nuestras vidas.  Tener un proyecto de vida en conjunto es la mejor opción, desarrollar un plan de vida, que garantice la estabilidad, tener bajo control la mayoría de los aspectos relacionados con la familia, produce tranquilidad y mantiene una llama motivadora que impulsa a continuar en busca de las metas propuestas.



Como parejas se pueden establecer metas y darle un propósito a las finanzas. Se pude iniciar pensando en la compra de una casa, prepararse para tener hijos, comprar un auto, tener vacaciones cada uno o dos años.  Lo más importante es que todo se de en común acuerdo estableciendo las metas financieras que no den lugar a los malentendidos y las confusiones.

¿Por qué el mal manejo de las finanzas afecta la armonía familiar?

Por varias razones:
  1. Porque se utiliza como instrumento de amenaza, discusión o manipulación: Cuando no hay propósitos definidos y uno o ambos cónyuges son dominados por el egoísmo, terminan manipulando o extorsionando, a través de los bienes, a su pareja. Por ejemplo, si uno de los cónyuges quiere seguir estudiando, para evitar que su pareja salga de la casa el/la esposo(a) le expresa que tendrá que trabajar para pagar sus estudios. Retirar el apoyo o presionarlo para que la pareja desista se constituye en una forma de extorsión que mina los intereses familiares.  Así mismo cuando se negocia con los hijos para que hagan las tareas o sus obligaciones, se le trasmite un mensaje equivocado, en la que todo se puede comprar, modificar o reparar con recursos materiales.
  2. Cuando hay desequilibrio en el manejo de las finanzas.  Y esto sucede porque no hay transparencia en el manejo de las finanzas, por malos hábitos o conductas equivocadas.  Por ejemplo, se apuesta el dinero que estaba destinado a la mensualidad del colegio de los hijos, en juegos. Cuando se gasta el dinero del arriendo en alcohol u otros vicios. Se malgasta el presupuesto familiar y luego vienen los problemas porque no hay con que pagar.
  3. Manejo individual de las finanzas sin consenso. Esto resulta un grave problema que afecta la estabilidad de la pareja y de la familia, el hecho de que no se realicen acuerdos previos sobre el manejo de las finanzas ocasiona un descontrol que mina la confianza y fortalece el egoísmo, es un factor que no produce prosperidad. Son actitudes que deben ser conversadas y  superadas desde el noviazgo acerca de cómo va a ser el manejo del dinero, los pagos y las tareas individuales que van a ayudar en el hogar.  


Recomendaciones

  1. Trabajar en equipo: Se fortalece la confianza y el respeto, además de que garantiza una buena comunicación. Produce prosperidad y se da un buen ejemplo a los hijos acerca del manejo de las finanzas.
  2. Entender los problemas de fondo: Básicamente es tratar de buscar las razones que me impulsan a manejar el dinero como lo estoy haciendo.  Esto me llevará a aceptar que estoy siendo egoísta, o que debo corregir una mala conducta o un mal hábito.
  3. Tener planes y proyecto de vida juntos. Vivir sobre la base de un proyecto de vida juntos garantiza que sean dos los que trabajen y no uno.  Que sean dos lo que produzcan y no uno. Hay una vieja frase que resulta muy reflexiva “El que no sabe para dónde va, cualquier bus le sirve”
  4. Construir acuerdos sobre el uso del dinero.  Pueden llevarse cuentas separadas o conjuntas y el que administre mejor la maneja.  Hay quienes recomiendan tener una cuenta conjunta y otra individual para cada miembro.  Cual sea la forma en decidan estará bien con tal que se haga en común acuerdo.
  5. Cuidar el lenguaje: Evitar expresiones como: “mi casa”, “mi carro”, etc., dentro del proyecto de vida familiar los bienes son en conjunto.  


Enfrentar situaciones difíciles debe conducirnos a la unidad y no a la individualidad, esto evitará los ataques y señalamientos hacía nuestro cónyuge. Siempre que tengamos un proyecto de vida familiar hallaremos fácilmente la razón del desajuste. Todas estas recomendaciones son extraídas del manual de vida, Dios es nuestro mejor consejero y busca siempre fortalecer el vínculo matrimonial y la armonía familiar.



Por
Edgardo Buelvas Arrieta
Terapista de Familia

Bibliografía
GUIA FACILITADORA PARA LIDERES DE PAREJAS. Chamorro, Jimmy y Mora Quintero Zaidy.  Fundación Editorial Publimundo. Bogotá, Colombia. ISBN. 978-958-8505-20-6. 2013.

martes, 18 de agosto de 2015

Finanzas Familiares - Esclavos Financieros

ESCLAVOS FINANCIEROS

“… los deudores son esclavos de sus acreedores”
                                                                                 Proverbios 22:7b

Hasta hace poco la esclavitud financiera significaba eso, esclavitud física. En tiempos antes del derecho romano, la pena por el incumplimiento en las deudas conducía a la pérdida del derecho de la libertad del deudor y su grupo familiar pasaba a ser propiedad del prestamista. En los primeros años del Derecho Romano se introdujo la figura de Apremio individual en la que el deudor que incumplía era sometido corporalmente por el prestamista  colocándose a su disposición hasta que, a través del fruto de su trabajo, se pusiera el día con lo pactado. Luego surgió la fiducia y también la prenda.

La esclavitud física dejo de existir, pero en su lugar quedo una igualmente preocupante la esclavitud mental, cientos de familias son destruidas por preocupaciones financieras, las presiones que ejercen las deudas producen descontrol que da lugar a las alteraciones psicológicas que desestabilizan la armonía en la familia. Pero el tema de la esclavitud no se da sólo por la falta de dinero, también se da por la abundancia, ya que se genera una dependencia y actitudes malsanas que terminan generando angustia mental por el temor a perderlo. Los esclavos financieros se forman en el ámbito familiar, cuando los padres son indisciplinados en el manejo del dinero, se crea una conducta equivocada y una visión errónea de lo que significa y cómo se debe manejar, los hijos replican los malos hábitos convirtiéndolos en potenciales esclavos financieros.

La razón por la que se utiliza el término esclavitud es porque las personas pierden la libertad de manejar organizadamente sus finanzas, pero sobretodo porque su condicionan psicológica no les permite asumir con tranquilidad las situaciones de la vida. Así, cuando el dinero falta o abunda, la persona se desestabiliza emocionalmente. Sobre esta condición son presos de sus impulsos porque pierden la voluntad y el dominio propio. Hace algún tiempo converse con una persona cercana quien me conto que tenía un serio problema de deudas y no sabía en qué momento había pasado esto, en Colombia, en algunas regiones, (seguro que en otros países sucederá igual) para salir de un “apuro” de dinero se utiliza un prestamista, el cual acredita una pequeña cantidades de dinero con intereses diarios altos, del 15 al 20%, así este acreedor o “PagaDiario” pasa todos los días por su renta, el cual el deudor debe tener a la mano para cancelar, aunque son montos pequeños, es posible que un pequeño comerciante pueda responder, pero cuando no se perciben ingresos diarios, la situación se vuelve agobiante,  y si de por si lidiar con uno es desesperante, se imaginan 32 o más.  Pues esta persona tenía 32 paga-diarios que lo acosaban mañana, tarde y noche.  Con una buena actitud y disposición, y siguiendo consejos pudo salir en pocos meses de todos.  Era tanto el desespero por prestar – me comenta el amigo – que muchas veces firmaba las tarjetas por el valor que le decían y recibía solo una pequeña cantidad, así la deuda se elevaba en 200 o 300%.  Ya no se trataba entonces de cubrir necesidades sino de una condición psicológica en la cual la persona se vuelve esclava, verdaderamente, del dinero.    

Estas podrían ser algunas causas de la esclavitud financiera, entre otras:

El abuso del crédito
Una deuda se origina cuando se pide prestado o se adquieren servicios que superan la capacidad de ingresos. La razón por la cual se abusa es por la falta de disciplina ya sea porque no se tiene el hábito de ahorrar y esperar con paciencia para tener lo deseado o porque no se puede resistir o no se tiene la capacidad de negarse a sí mismo el deseo de adquirir algo.  Podemos tener obligaciones que son básicamente todos los compromisos que entran dentro del presupuesto y no superan la capacidad de ingreso.

Intereses egoístas
Nacen de conductas malsanas las cuales generan codicia, por ejemplo, ésta se define como el deseo desmedido e incontrolable de tener aquello que otra persona posee, y que puede llevar a la otra persona a asumir comportamientos dañinos para quien se interponga en su propósito. Otro ejemplo puede ser la avaricia, que es el deseo de acumular más de lo que se tiene exponiendo incluso su propia salud y a su familia.

Libres al fin
Salir de la esclavitud financiera requiere, en primer lugar, tener un compromiso serio y tomar la decisión que nos lleve a dejar de lado los malos hábitos, San Pablo decía “se vivir en la abundancia y también en la escases”, básicamente significa que nuestra estabilidad emocional no se afecte si falta o abunda el dinero.  Antes que nada debemos sacar de nuestro corazón todas nuestras posesiones, no se trata, de vivir una vida de necesidades, sino de libertad, en la que no dependamos del dinero, sino de los principios de bondad que Dios nos enseña, para ello debemos aceptar que el dinero no es un fin sino un medio para alcanzar la felicidad y la armonía de familia.

En segundo lugar, salir de deudas, para ellos debemos ajustar nuestro presupuesto, se requiere una voluntad firme para sacrificar aquellos gastos que no estén dentro de nuestras necesidades básicas, establecer un plan de compras de alimentos que garantice ahorro, comprar ropa de buena calidad, y hacerlo en periodos de tiempo considerables. Regular el consumo energía eléctrica y agua.  Todo aquello que implique ahorro es bienvenido. Los excedentes ayudaran a cubrir las deudas. Evite abrir un “hueco” para tapar otro. Hable con sus acreedores, no se esconda, pacte con ellos planes de pagos que se ajusten a su condición.

Existe suficiente material en la red y otro tanto mucho más confiable en la Biblia, la cual se constituye en un compendio de administración financiera, solo se necesita una buena actitud y el deseo ferviente de ser libres para descubrirlo y vivir tranquilos y prósperos.



Por
Edgardo Buelvas Arrieta
Terapista de Familia


lunes, 17 de agosto de 2015

Finanzas Familiares - ¿Por qué un niño roba?

NUEVO DOMINIO TERAPIA DE FAMILIA
www.terapiadefamilia.net

¿POR QUÉ UN NIÑO ROBA?

“No corregir al hijo es no quererlo; amarlo es disciplinarlo.”
                                                                                          Proverbios 13:24


Todas las conductas son adquiridas a lo largo del proceso de formación, como habíamos anotado en artículos anteriores, los niños aprenden más por lo que ven y sienten que por lo que se dice, sin embargo, las reglas y normas que rigen en la casa van a determinar gran parte de su conducta, que luego van mostrar tanto dentro como fuera de la casa.



Cuando un niño pequeño toma algún objeto, estando de visita con los padres, en casa de amigos y familiares, realmente no lo hace de manera premeditada, sólo se ve divirtiéndose con el juguete, porque le llama la atención la forma, el color, etc., de esta manera puede tomar la decisión de llevárselo a su casa (para horror de sus padres) sin la intención de hacer daño, ya que no tiene estas asociaciones mentales establecidas, respecto, por ejemplo, de la propiedad del artículo, tampoco tiene un concepto claro de si es bueno o malo tomarlo,  sólo quiere jugar con él.  En este sentido se debe aprovechar la situación para comenzar a promover en el niño los principios y valores, y para que el comienza a establecer las asociaciones correctas de pertenencia o propiedad.

En los niños más grandes, el robo puede tener varias causas:
NUEVO DOMINIO TERAPIA DE FAMILIA
  • El robo representa a veces una manera de levantar el ego infantil; se sienten superiores cuando "se salen con la suya" por haberse robado alguna cosa. Con esto quieren impresionar a sus amigos o ganar la aprobación y amistad de sus compañeros, regalándoles cosas robadas.
  • El niño también puede robar por necesidades reales, o puede ser incitado por el grupo de amigos para quienes robar es lo habitual.
  • Un niño incitado a robar por la presión de grupo aprovecha el caso de una madre descuidada que deja dinero en cualquier parte de la casa, lo cual es una continua tentación, porque él sabe que ella nunca se daría cuenta de lo que falta.
  • Pero también se da el caso del niño que roba insistentemente para cubrir algún sentimiento negativo sobre sí mismo. Es bueno tratar de descubrir si en el niño hay un fuerte sentimiento de injusticia; tal vez se siente deprimido porque piensa que se le debería tratar mejor y que el mundo es un lugar injusto porque no tiene todo lo que desea.


¿Cómo actuar frente a este hecho?

Los padres deben tener una actitud de desaprobación de los hechos y empezar un proceso de formación, no pueden justificar el robo tratando de salvaguardar la imagen o de restaurarla, ya que eso trasmitirá un mensaje de aprobación y de respaldo o complicidad en los sucesos. Se debe conducir al niño al arrepentimiento, a pedir perdón y restituir. Por otro lado los padres deben orientar a su hijo a no enfocarse en las carencias sino en lo que ya tienen, y que hay momentos en los que no se puede tener lo que se desea, ni obtener todo cuanto queramos, que hay que tener paciencia y luchar para tener lo que anhelamos. Eso sí, al igual que en los pequeños, se debe aprovechar para enseñar respeto por las pertenencias ajenas y dejar claro lo que acarrea esta conducta si persiste en ellas.

Si los robos del niño significan que quiere algo diferente a los objetos que toma, puede ser porque tal vez esté buscando más atención de la que recibe, o anhela sobresalir en algo para reafirmar su valía y aceptación. En este caso, lo que el niño necesita es que se le reafirme con palabras y con hechos el cariño que se le tiene, escuchándole, e interesándose por sus cosas.
Cualquiera que sea la causa por la cual el niño roba, no se le puede condenar por su comportamiento, pues el objetivo no es deshacerse del síntoma del robo, sino de su causa.

Tomar medidas preventivas para evitar estas conductas nos ahorrara una gran cantidad de circunstancias penosas y dolorosas, nuestra actitud como padres debe ser la correcta, entendamos que cada conducta tiene una causa y es ahí donde tenemos que mirar, sucede igual cuando manifestamos algún dolor, hasta que no destruyamos las piedras en los riñones el dolor no desaparecerá, con calmantes no lo podemos hacer, ya que el dolor ira y vendrá, y cada vez con más fuerza, así sucede con las conductas equivocadas de nuestros hijos, si enfatizamos más en esconder los síntomas la conducta se hará cada vez más fuerte.

NUEVO DOMINIO TERAPIA DE FAMILIA

Por
Edgardo Buelvas Arrieta
Terapista de Familia

domingo, 9 de agosto de 2015

Finanzas Familiares - Haciendo Frente a las Crisis Financieras

HACIENDO FRENTE A LAS CRISIS FINANCIERAS

“El que se porta honradamente en lo poco, también se porta honradamente en lo mucho”
                                                                                                          Lucas 16:10


Siempre vamos a enfrentar momentos difíciles en nuestro hogar, la diferencia entre una familia que se quiebra y otra que se fortalece a pesar de, está en la unidad con la que enfrentan dichas situaciones. Más específicamente las crisis financieras necesitan de la unidad y comprensión de todos los miembros.  Algunos padres deciden afrontar solos las circunstancias adversas, dejando a sus hijos por fuera, sobre el concepto errado de que los hijos no tienen que saber la realidad financiera de la familia, con esto lo que hacen es privar a sus hijos de que aprendan a enfrentar situaciones similares en un futuro. Si hay algo que afirme el carácter de un hijo es que vea a sus padres nadar contra la corriente, salir adelante frente a los problemas financieros. Se les hace mucho más daño trasmitiéndoles el mensaje de que todo está bien, y que nunca van a tener problemas en la vida.

El mensaje que deben manejar los padres, de frente a una crisis financiera, es un mensaje esperanzador, y no trágico o dramático.  Dándole valor a las cosas que se han conseguido con esfuerzo, y explicándoles por qué en estos momentos no se puede satisfacer deseos sobre cosas que no son tan necesarias.  A ellos se les debe invitar que participen con su opinión sobre algunas decisiones, hay otras en la que los padres las deben hacer sin su consentimiento.

A pesar de que cada familia es diferente por las condiciones que cada una maneja, se pueden presentar algunos sucesos, como los siguientes:

Los antojos de los hijos: Es muy importante que los hijos aprendan a valorar lo que tienen, sin pretender tener lo que no está a su alcance.

No dejar que el ambiente familiar se vea afectado: Los problemas económicos suelen colocarnos al límite de nuestras alteraciones psicológicas o despertar recuerdos que abren heridas ya cerradas tanto con la pareja, como con los hijos. En todo caso, no podemos sumarle un problema a otro problema. Un conflicto conyugal o un problema con los hijos volverán más complejo el dilema económico.

Las crisis son cíclicas: Hay momentos malos y buenos, y estos ciclos acompañan la vida, pero siempre que se tenga la fortaleza de superar una dificultad, se desarrollara consigo misma el valor para enfrentar una más fuerte. Ya que en la medida en que crecemos financieramente crecerán también los problemas, por eso si somos fieles con una buena administración financiera en lo poco también lo seremos en lo mucho, y llenaremos de esperanza nuestro hogar en lugar del desespero.

Debemos aprender a desarrollar estrategias para enfrentar las crisis o para evitar que nos golpeen con mucha fuerza, el presupuesto familiar es una herramienta esencial que permite conocer la realidad de las finanzas en el hogar.  El llevarlo con constancia hace parte de la fidelidad que nos llevará a experimentar prosperidad.  También desarrolla unidad en la pareja, y en general en toda la familia.  Todas las situaciones, en especial las crisis económicas, nos llevan a madurar, a crecer y fortalecer el matrimonio.

Nuestro sentido de gratitud a Dios, aun por las pruebas, despertará una confianza que nos llevara a enfrentar cualquier crisis y a desarrollar una inteligencia emocional y espiritual para experimentar tiempos de prosperidad manteniéndose la unidad y el amor.


Por
Edgardo Buelvas Arrieta
Terapista de Familia

Bibliografía

GUIA FACILITADORA PARA LIDERES DE PAREJAS. Chamorro, Jimmy y Mora Quintero Zaidy.  Fundación Editorial Publimundo. Bogotá, Colombia. ISBN. 978-958-8505-20-6. 2013.

martes, 4 de agosto de 2015

Finanzas Familiares - ¿Tiene la culpa el dinero?

¿TIENE LA CULPA EL DINERO?

“Porque el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. Por codiciarlo, algunos se han desviado de la fe y se han causado muchísimos sinsabores.”
                                                                       1 Timoteo 6:10


En un informe del periódico el Tiempo acerca de las estadísticas de divorcio en el año 2001 en Colombia, colocaba como primera causal de divorcio la situación económica.  Aunque la crisis económica se ha ido superando, es una causa que sigue estando en los primeros lugares. No sólo en Colombia, también en varios países de América Latina.  En términos generales sigue siendo un tema generador de discusiones sea por falta o por abundancia del mismo; cuando es poco merodea el temor de que sea malgastado y seguidamente sobrevienen los reclamos por el mal uso, ya que no alcanza para cubrir las necesidades básicas.  Y cuando hay suficiente dinero, igualmente sobreviene la preocupación por no perder lo conseguido o se crea un clima de incertidumbre sobre el abuso en comodidades y gastos sin explicación.  De alguna manera los padres terminan comprando el tiempo que merecen sus hijos con lujos y excentricidades, y la vida y las relaciones terminan girando alrededor del dinero.

Para ubicarnos en el contexto de lo que el dinero puede llegar a derrumbar en la vida de pareja y en general en al ambiente familiar vamos a plantearnos los siguientes interrogantes:

¿Fue el dinero lo que unió a la pareja?

Definitivamente en la mayoría de los casos, es el amor, la primera causa de unión marital, si este se cultiva, alimenta y fortalece, la pareja tendrá fuerzas, entusiasmo y creatividad para trabajar en equipo, para esforzarse y para emprender proyectos que los van a conducir a la prosperidad. El amor es la única fuerza que puede llegar a sostener el matrimonio y el hogar, Chamorro y Mora (2013), porque el amor es una decisión y no un sentimiento que cambia o con las circunstancias que se vivan. A diario escucho a personas, en especial las mujeres, decir, “si me voy a conseguir un hombre que sea con plata (dinero)”, bien, no critico su deseo de estar bien y sentirse seguras, pero ese tipo de pensamientos condiciona las relaciones a un estado de conveniencia, y en caso de que se les cumpla el deseo, ¿quién les garantiza que sean felices? o ¿Qué pasa si al poco tiempo quedan en bancarrota? El amor tiene que ser capaz de soportar los tiempos de adversidad, o donde queda aquella promesa de “…en las escasez  y en la abundancia…” no pensemos que la felicidad solo es en la riqueza y en la comodidad.

Entonces ¿Por qué se presentan dificultades a causa del dinero?

Cuando dejamos que el dinero se convierta en la base fundamental de la pareja  y de la familia, por eso es necesario no dejar de alimentar el amor y eso se logra cuando llenamos las necesidades y expectativas de la pareja.

El dinero debe ser un medio y no un fin, y viene como consecuencia del esfuerzo que como pareja y familia realizamos.  En mi experiencia personal he considerado a Dios como fuente de bendición, esto me garantiza una fuente integral de provisión en donde los recursos financieros llegan de parte de El como consecuencia de la fe y del esfuerzo que como familia hacemos diariamente. Junto con mi esposa e hijo hemos vivido épocas de abundancia y de necesidad, aprendimos a administrar sabiamente en la abundancia y disfrutado de la provisión y en las épocas de escasez, gracias al amor, soportamos las frustraciones que genera la falta de dinero y las deudas, priorizando nuestra intención de salir de la crisis financiera.

El dinero no viene sólo ni es fácil de alcanzar, viene como consecuencia de manejar una relación fuerte fundamentada en el amor, es mucho más fácil si se involucra a Dios ya que el fortalece el amor y aumenta las fuerzas en equipo en función de lo anhelado, apretar en momentos de austeridad y administrar en tiempos de abundancia, buscar oportunidades detrás de cada obstáculo y alcanzar la victoria en todo lo que emprendan.


Por
Edgardo Buelvas Arrieta
Terapista de Familia

Bibliografía
GUIA FACILITADORA PARA LIDERES DE PAREJAS. Chamorro, Jimmy y Mora Quintero Zaidy.  Fundación Editorial Publimundo. Bogotá, Colombia. ISBN. 978-958-8505-20-6. 2013.